Serán seis los ejemplares de lince ibérico que en 2025 serán liberados en el Cerrato Palentino, tras evaluarse durante los últimos meses las condiciones en las que podrían habitar los animales.
El objetivo es la reintroducción de esta especie en algunas zonas de Castilla y León, de dónde desapareció hace casi 40 años. El Cerrato Palentino era candidato a ser una de ellas y el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico la ha elegido entre otras, según EFE.
La abundancia de las poblaciones conejo y de cobertura de matorral, la receptividad de los pueblos del entorno y la mayor superficie de terrenos han sido los aspectos que han permitido la elección del Cerrato.
La de Palencia será la primera área de reintroducción en la mitad norte peninsular, lo que supondrá un hito en la recuperación del lince ibérico en la Península Ibérica.
Tras la aprobación, se abre una nueva fase en la que se habilitarán mejoras para el hábitat de la especie. En concreto, se van a construir nuevas charcas y bebederos, que ayudarán al aumento de ejemplares de conejo, principal alimento del lince ibérico.
También se avanzará en la implementación de medidas correctoras en las zonas de mayor riesgo de atropello, mediante desbroces de cunetas y mejora de pasos de fauna.
En total, la inversión prevista para el desarrollo del proyecto de reintroducción del lince en Castilla y León hasta junio de 2026 alcanza 1,9 millones de euros, entre la financiación de equipos técnicos, materiales, infraestructuras y proyectos de mejoras de hábitat a implantar en terrenos públicos y privados con acuerdos de colaboración con la administración. EFE
